Hombre rico, hombre pobre.
Esa es la diferencia en muchos casos, dicen que el dinero no da la felicidad pero según el genial Woody Allen procura una sensación tan parecida, que necesita un especialista muy avanzado para verificar la diferencia.
Quizás un artillero sienta algo parecido si se encuentra en uno de esos bonitos saraos de medio oriente y le dan a elegir entre un M240 y una minigun.
Veamos la razón de que las comparaciones sean odiosas.
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