Dentro de las tradiciones que forman parte de las Fuerzas Armadas Españolas se encuentra la "Oración a los caídos", un recuerdo de otras épocas pero que ha calado de forma plena en todos aquellos que componen, han formado parte o simplemente comparten su simpatía con los tres ejércitos. Lo magnífico de estos versos en forma de soneto es que recoge el sentimiento de patriotismo de los que forman parte de las FAS, no importa si se es católico, judío, musulmán, agnóstico o lo que le dé la gana a uno ser en estos tiempos de Juan Palomo.
La oración siempre ha sido más para los vivos que para los muertos y esta llega más que al corazón a las entrañas, porque es difícil, muy difícil, escuchar estas palabras delante de un ataúd cubierto por la bandera de España y no sentir nada, eso solo lo consiguen los políticos, claro está, empeñados en modificarla, mutilarla, eliminarla o hacerle cualquier cosa que termine en -arla.
Versos que carecen de brillantez poética pero que remueven las tripas, España pura.
Lo demandó el honor y obedecieron,
los requirió el deber y lo acataron,
con su sangre, la empresa rubricaron,
con su esfuerzo, la Patria redimieron.
Fueron grandes y fuertes porque fueron
fieles al juramento que empeñaron.
Por eso, como valientes lucharon.
Por eso, como mártires murieron.
Inmolarse por Dios fue su destino,
salvar a España, su pasión entera,
servir en el Ejército, su vocación y sino.
No pudieron querer a otra Bandera,
no quisieron andar otro camino,
no supieron morir de otra manera.
Si después de esto quieres oír el Toque de Oración solo tienes que pinchar aquí donde la UNAMO pone a disposición de los internautas este toque militar.
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