En ciertos momentos las demostraciones militares se convierten en verdaderos espectáculos circenses, se impone la espectacularidad al sentido común y la gente se entusiasma sin pensar dos veces que se está haciendo con sus impuestos.
Una cosa son los desfiles, las demostraciones operativas y otra las estupideces propias del showtime.
El F-18 que veremos a continuación es un raro espécimen capaz de estacionar en la pista mediante un derrape que firmaría Fernando Alonso, lo dicho, como el dinero es de todos parece que duele menos si algo sale mal y destrozamos alguna cosita de un aparato que en 2003 solo costaba unos 35 millones de $.
1 comentario:
¡No seas tan duro hombre!, no es demostración de nada. Al parecer el avión tenía problemas en uno de los trenes traseros. Si te fijas cuando aterrizas hay humareda salienod del izquierod durante toda la rodadura.
No conozco a ningún piloto al que le gustaría hacer eso voluntariamente... aunque después de las cosas que empieza a leer uno en la prensa a diario ya no se sabe muy bien qué considerar normal y qué no.
No me pierdo ni uno de tus vídeos, ¡enhorabuena!,
Rocket
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