Es quizás el tipo de bomba no nuclear más temida por los gobiernos occidentales pese a que no tiene incidencia física sobre los seres vivos. Su poder es devastador ya que es capaz de reducir a simple chatarra todos aquellos componentes electrónicos que hacen que nuestro mundo funcione. Este tipo de armamento no mata pero su efecto es todavía peor ya que acaba con el sistema social de una ciudad, región o nación. Es la bomba de la anarquía ya que acaba con todas las estructuras del orden establecido. Es el efecto 2.000 llevado al extremo más absoluto. Es el caos total.
La muerte ya llegará después.
¿Eres capaz de imaginar un hogar moderno en el que no funcionase ningún aparato eléctrico dotado de un circuito electrónico?
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