Pocas veces se tiene la ocasión de ver un ejército de la antigüedad con tanta veracidad como se puede ver en china, la razón es que no es una reproducción idealizada, lo que vemos es el ejército del primer emperador de la China a tamaño real, con sus uniformes de guerra completos a los que solo les falta la vida.
Más de 7.000 figuras de hombres y animales listos para la batalla, y lo mejor está por llegar, ya que muchas de las figuras permanecen enterradas hasta que se disponga de los conocimientos técnicos que permitan evitar la inmediata oxidación de los pigmentos que dotan de vivos colores a las figuras y que desaparecen en cuestión de horas al contacto con el oxígeno tras 2.000 años de enterramiento.
El espectáculo es único ya que no hay dos figuras iguales. Son el ejército inmortal, los soldados de Terracota.
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