Es una de esas tareas complejas que a los ojos de un profano parece sencilla.
Repostar en vuelo, una especie de fertilización entre aviones, un apareamiento suave y peligroso donde el macho y la hembra cambian de posición según posean cesta o pértiga.
Tenemos ocasión de ver como se ejecuta un reabastecimiento de la mano de la Fuerza Aérea Brasileña y de las dificultades que se presentan para realizar la toma de combustible con buen tiempo, imaginémonos como es la cosa con una meteorología complicada y cargado hasta los topes de armamento, con un horario que cumplir y poco margen de error.
Que bonito es el amor.
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